Como una nueva medida innovadora en la lucha contra la violencia de género, se utilizan perros adiestrados como escoltas a tiempo completo de víctimas bajo esto tipo de amenaza.
La raza de perros elegida es el Pastor Alemán, una de las razas más versátiles de todo el mundo, habitualmente utilizado como guardián, guía o animal de salvamento, el cual en este caso correctamente adiestrado responderá a las órdenes de la persona a la que escolta, y solo atacará en caso de que esta requiera y autorice su ayuda.
El perro ha de superar un correcto adiestramiento orientado a la tarea de vigilar a la víctima, y ha de ser inscrito en el registro de perros peligrosos.
Las ventajas para las personas afectadas van desde tener un "agente" velando por su seguridad a tiempo completo, a disponer de una rápida actuación "in situ" por parte del animal, sin tener que esperar a que los cuerpos de seguridad lleguen para impedir algún tipo de agresión. Además las víctimas, podrán confraternizar con el animal, con las ventajas que este les puede aportar anímica-mente. Otro aspecto a tener en cuenta es que el perro será bien acogido en una familia aquejada de algún problema relacionado con la violencia de género, incluso por los miembros más jóvenes que reciben al animal como un compañero más en su nueva vida, y como un paso más para dejar atrás las posibles malas experiencias sufridas.
Este es el caso de "Álex" un pastor alemán que ha sido promovido por la asociación para la protección de mujeres maltratadas Ve-la luz en Galicia.
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