El Bulldog Francés tiene su origen en Francia, aunque sus inicios se hallan en Inglaterra ya que su pariente más cercano es el Bulldog Inglés.
En un Bulldog en buen estado su peso no debe ser inferior a los 8 kg ni superior a los 14 ya que su tamaño es proporcional al peso.
Este perro es ideal para un piso pequeño; necesita ejercicio durante unos 55 minutos diarios. No es un perro ideal para grandes caminatas pero es un buen animal de compañía, muy juguetón, activo y defensor del dueño. Es un perro muy casero, le encanta estar en casa en compañía de sus dueños y recibir sus mimos.
El Bulldog Francés disfruta con la compañía de los peques de la casa, es increíble pero es capaz de enseñar a los niños curiosamente a realizar determinadas actividades, incluso fue capaz de enseñar a un niño a gatear, seguro que os estaréis pensando, ¿cómo es posible este suceso?, pues veréis, los niños tienden a observar conductas de los adultos e imitarlas, en este caso este perro se arrastraba por el suelo simulando un común gateo lo que el niño mediante la observación al animal comenzó a imitar.
Es un perro muy dulce, afectuoso y paciente, afectuoso particularmente con los niños, y muy protector con ellos, especialmente las hembras.
Esta raza ladra raramente, salvo cuando le hace falta: para llamar la atención, cuando necesita algo o cuando está contrariado. Destaca por ser un buen guardián que ladrará cuando sienta un ruido y por ser un perro muy tranquilo al que le gusta dormir mucho,además de por su increíble inteligencia.
Un factor muy importante es el peso en esta raza, es fundamental tenerle controlada la dieta, ya que el sobrepeso puede ocasionarles problemas respiratorios, complicaciones cardíacas, problemas de columna...Esta raza tiene una predisposición preocupante a desarrollar diversos tipos de cáncer, malformaciones congénitas y alergias en la piel...
No hay comentarios:
Publicar un comentario